jueves, 18 de diciembre de 2014

Nunca es triste la verdad


A la vuelta de la esquina hay más esquinas y una calle que sigue a otra por formar una maraña donde nos perdemos. Nadie puede saber del pensamiento de nadie a no ser que te sea sincero de corazón y con la verdad en la garganta. Pero ese corazón, si es el nuestro, nos salva de muchas cosas por englobar nuestra vida. Jamás dependas de nadie para vivir: ni de tu hijo, ni tus amigos, ni tu proximo amor. Parece raro esto que digo y a ser sincero, puede dar miedo pero sólo de esa manera puedes compartir tu corazón y tu felicidad con los que te rodean. Comprendo que la Navidad te sea amarga y hasta cree un nudo en la garganta en momentos especiales...pero tú, que eres inteligente y una persona sensible que sabe valorar con tino, has de saber de los sótanos de tu pensamiento y después de dar muchas vueltas de soledad, lo sabio florece hasta ser agradable...
En mi rincón lleno de música y palabras estoy como pez en el agua. Disfruto de mi soledad a pesar de estos tiempos que desencantan más que por la falta de trabajo, por el olvido que tiene la gente de su corazón...y ese corazón, no tiene trasplante.




2 comentarios:

maduixeta dijo...

Serrat decía:
Nunca es triste la verdad
lo que no tiene es remedio.
Cuéntale a tu corazón
que existe siempre una razón
escondida en cada verso.
Del derecho y del revés
uno solo es lo que es
y anda siempre con lo puesto.

Has escrito un precioso texto esta noche. Me ha llegado al corazón.

Me gusta leerte y compartir belleza.

un beso

AtHeNeA dijo...

Me siento lectora y ...más que nunca receptora de sabias palabras y sentimientos que llegan desnudos, acompañando sensaciones. Efectivamente, hay cosas que no tienen trasplante ni reposición y pueden convertirse en una permanente herida , a veces imperceptible, que supura. Me gusta como lo expresas... Saludos desde isla de luz... Envuelta en música que da forma al silencio y color a cada momento. Ath.