sábado, 10 de junio de 2017

Para antes de hacer daño



El lado de mi sensibilidad hace que sea un espectador. La gente desfila ante mi mirada impregnando mi sentir...profundizo y profundizo con peso de gravedad que a veces me hunde o me hace volar. El dolor o la alegría son mis aliados para aprender de la vida y así servir cuando mi mano toca otra mano.

Intento dar un sentido a esta película donde me veo envuelto a veces en primera persona, a veces en extra. Darse es recibir de tu propia sangre con valor de calidad; una diálisis del alma para eliminar esas impurezas que se desprenden al hacer un acto que se guarda en la memoria para decirnos quienes somos.

...pero hay momentos donde no respondemos en el momento de hacerlo y, pesa en la conciencia cuando hasta muchas veces, no podemos dormir. A veces la bondad es un tren AVE que para con brevedad a nuestra acción pues nos debemos apresurar quizá sin equipaje...

El valor de una mano amiga no está en estrecharla, simplemente cuando sientes su fuerza en tí, te deja paralizado; sin habla con el corazón que bombea silencioso por saber que esa persona a algo que hiciste, te llevará con ella para siempre.



1 comentario:

dijo...

Muy bonito!!
Y sí,esas personas a las que se les tiende la mano o nos la tienden,nunca serán olvidadas.
Me gusta esa frase de "la diálisis del alma",muy buena!
Besucos